BUENOS AIRES, Argentina | REUTERS
Diego Maradona, idolatrado en Argentina y el mundo por su brillante carrera futbolística, regresa a la selección de su país como entrenador, respaldado por las principales estrellas del equipo pero sin más que un tibio aval popular.
El ex jugador, de 47 años, como el nuevo director técnico de un equipo que, pese a estar lleno de figuras como Lionel Messi, Carlos Tevez o Juan Román Riquelme, no logra entusiasmar con su juego a los seguidores.
Una encuesta de la edición de internet del diario La Nación realizada entre 9.541 personas reflejó que el 72,2 por ciento considera desacertada la llegada de Maradona como entrenador, mientras que en el sitio Infobae.com el 79,9 por ciento de los 9.804 encuestados también rechazó la designación.
Las opiniones de los lectores de los diarios en su mayoría pusieron en duda la capacidad de Maradona como técnico después de dos cortas experiencias en Mandiyú de Corrientes y Racing Club, mientras cumplía una sanción por dopaje durante el Mundial de 1994 en Estados Unidos.
La mayoría de los comentarios resaltó el problema de Maradona con las drogas y su capacidad para estar al frente de un plantel de fútbol.
Pero la figura más legendaria del fútbol argentino, que contará con el asesoramiento de Carlos Bilardo, se mostró confiado en lograr un mayor consenso.
"Ahora no solamente voy a tener que luchar por los maradonianos, sino también voy a luchar por los otros argentinos que por ahí no me votaron, pero que son argentinos y van a tener que hinchar por la (camiseta) celeste y blanca", dijo en una breve charla con periodistas.
Maradona dijo que en breve definirá a sus colaboradores y agitó la tradicional rivalidad deportiva entre su país y el multicampeón Brasil al contrastar su refinado estilo de jugador con la práctica más aguerrida de Dunga, actual entrenador del gigante sudamericano.
"Yo no juego como Dunga, absolutamente. Dunga pegaba, yo no, yo los esquivaba", bromeó ante periodistas.
Respaldo irrestricto
A pesar del escepticismo que rodea la designación y a la corta experiencia que acredita Maradona como director técnico, algunas de las máximas figuras internacionales de la selección argentina se entusiasmaron con la posibilidad de ser dirigidos por el crack.
"Yo creo que Diego va a querer entrar en la cancha con nosotros. Conociéndolo sabemos que va a ser así", se entusiasmó Tevez, delantero del Manchester United de Inglaterra.
El jugador surgido en Boca Juniors reconoció en una entrevista con el canal Fox Sports que la tarea de director pondrá a prueba a Maradona.
"Un técnico tiene que ser frío. Sabemos que estos años que va a estar con nosotros le van a salir canas de tanto sufrir, pero conociéndolo a Diego uno no puede pedir que cambie, no va a cambiar nunca", añadió en referencia al carácter explosivo del ex astro.
La nueva joya del fútbol argentino, Messi, también apoyó el nombramiento de "El Diez", como se lo conoce localmente, y optó por dejar en el olvido una crítica menor que había recibido de parte del ahora entrenador de la selección.
"Hay cosas que se dicen sin pensarlo", dijo al diario deportivo italiano Gazzetta dello Sport quien fue señalado por el propio Maradona como su eventual sucesor.
"Sé que Diego me aprecia y no le guardo rencor (...) No habrá problemas. El es un grande. Lo admiro por lo que le dio al fútbol argentino. Soy optimista. La generación que ganó los Juegos Olímpicos de Pekín promete", agregó.
Maradona fue designado en uno de los cargos más calientes de Argentina, un país fascinado hasta lo exhaustivo por el fútbol, a pesar de que antes de la decisión las encuestas sumaban la mayoría de los votos para Carlos Bianchi.
Pero el titular de la Asociación del Fútbol Argentino, Julio Grondona, a cargo desde 1979 y quien siempre reconoció la gran ayuda que la aparición de Maradona dio a su carrera dirigencial, decidió ofrecerle el puesto al ex astro junto con Carlos Bilardo como asesor.
"Desde el 79 que quería que Maradona fuera técnico de la selección", dijo Grondona el miércoles.
"Hay un antes y un después de Maradona en el fútbol argentino", agregó.
Maradona fue campeón mundial como jugador en 1986 en México y subcampeón en 1990 en Italia, cuando fue dirigido por Bilardo.
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