México ocupa el segundo lugar en número de cirugías estéticas en América Latina, después de Brasil y le siguen Argentina y Colombia. Las intervenciones más frecuentes son la rinoplastía (cirugía de nariz), la colocación de implantes mamarios y la liposucción.
Nicolás Sastre, director de Especialidad Quirúrgica del Hospital General de México, explicó que la liposucción no debiera ser un procedimiento para bajar de peso, sin embargo, la realizan médicos generales y charlatanes que operan hasta en mesas de cocina y pueden ocasionar la muerte.
En el Hospital General de México, el 20 por ciento de las cirugías que se realizan son estéticas y el resto reconstructivas, de éstas, la intervenciones de mano ocupa 35 por ciento, la de labio y paladar hendido 15 por ciento y la de secuelas de trauma 30 por ciento.
Los costos dependen del nivel socioeconómico, que se asigna en el Departamento de Trabajo Social, de acuerdo con varios parámetros, de tal manera que una rinoplastía puede costar de cero a mil 500 pesos, en cambio en una institución privada el precio se eleva hasta 50 mil pesos.
Indicó que hay cirugías en las que se puede perder sensibilidad como es el caso de las reducciones de mama, porque se afecta el área de la aureola y el pezón, mientras que en una abdominoplastía (cuando se quita sobrante de piel y grasa al abdomen) se hace un despegamiento casi hasta las costillas, que implica cortar nervios, por lo que también se pierde sensibilidad en toda el área, pero es temporal.
El especialista advirtió que las personas que recurren a charlatanes o médicos generales sin especialidad en cirugía plástica reconstructiva y estética pueden morir si se somete a un procedimiento de este tipo.
Recomendó a los pacientes solicitarle a su cirujano que le muestre un documento, un diploma o una credencial del Consejo Mexicano de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva, además de su cédula de especialista o su permiso para ejercer la especialidad de la cirugía plástica, otorgada por la Secretaría de Educación Pública, para que tenga la seguridad de que no es un charlatán y no ponga en riesgo su vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario