Según la Emsat, la integración tarifaria se dará cuando se unifique el sistema de recaudo en la ciudad. En tres estaciones regionales los usuarios cancelan dos veces.
El pago del doble pasaje en la terminal microrregional La Ofelia al integrarse con el sistema urbano, se repite en otras dos estaciones interparroquiales de la ciudad.
En el andén para ir a Tumbaco en la estación de la Río Coca, el español Luis Pardo se quejaba del servicio. “Aquí el transporte es un abuso. En Barcelona un usuario con un boleto prepagado por rutas puede recorrer toda la ciudad, incluidos los valles y poblaciones cercanas”, explicó.
Pardo, quien iba a Cumbayá, dijo que en su país el transporte es más caro, pero son buses nuevos y tienen seguro de vida. “Aquí no. Por eso, no se justifica el doble pasaje al pasar de transportes”.
En Quito hay tres terminales interparroquiales e intercantonales: una, la de La Marín para dirigirse al valle de Los Chillos; dos, Río Coca para ir al valle de Tumbaco y parroquias del nororiente; y, tres, la de La Ofelia, que se abrió el sábado, para los cantones y las parroquias del norte y noroccidente. Estas estaciones se conectan con el servicio de transporte urbano de corredores exclusivos.
En La Marín y en la Río Coca los viajeros pueden tomar los articulados de la Ecovía. Los de La Ofelia, en cambio, deben avanzar en los articulados del Corredor Central Norte. Esta es una medida planificada que está en el Plan Maestro de Transporte de Quito.
A pesar de la integración física, la integración tarifaria no existe. Son 89 000 viajeros que pagan doble pasaje (ver infografía).
Ese es un inconveniente que evidenció en La Ofelia. El viernes los moradores de Llano Grande bloquearon la Panamericana Norte para protestar por el doble pasaje que debían pagar si ingresaban a la terminal de La Ofelia.
Desde ese día, la Empresa Metropolitana de Servicio y Administración de Transporte (Emsat), el MetrobúsQ, el Corredor Central Norte y los choferes estudian la integración tarifaria o un subsidio para evitar el doble pago.
Para Gerardo Terán, conductor de Reina del Quinche, la solución es acatar las disposiciones de la Emsat. “Para todos es duro un cambio”, dijo. En su andén en la Río Coca, recordó que hace tres años con sus compañeros protestaron para evitar el cobro del doble pasaje para los vecinos de El Quinche pero no lo consiguieron.
Rosa Peñaherrera, otra usuaria de la estación interparroquial, no se hace problema en pagar dos veces. “Cualquier usuario debe tener
un presupuesto de movilización. No tienen USD 0,25, pero sí tienen dinero para novelerías...”.
En la estación de La Marín, que funciona desde el 2004, los pasajeros también se han acostumbrado al doble pasaje. Por ejemplo, María
Logacho, vecina de Conocoto, no se explica cómo podría aplicarse un solo pasaje porque los buses son de otras compañías.
Roberto Noboa, gerente de Tránsito de la Emsat, asegura que lo óptimo es tener un sistema de recaudación electrónico compatible en las troncales. “Este debe instalarse en el trole, Corredor Central Norte y Ecovía para poder unificar las tarifas con los buses interparroquiales e intercantonales. Pero eso todavía no está planificado”, reveló el funcionario.
Sin embargo, en el Plan Maestro de Transporte ya se estableció la implementación de un sistema de recaudación uniforme. “Se pasaría a operar con boletos prepagados y tarjetas de viajes múltiples. Funcionará con lectura en la subida del bus local y en las estaciones de transferencia”, indica el texto, vigente desde el 2000.
Aunque todavía no hay un plazo límite, el Trolebús será el primero que operará con un nuevo sistema de recaudo desde de febrero.
Pero para los transportistas una de las soluciones es que el Cabildo tome una decisión ya que no pueden bajar los pasajes. Guido Molina, presidente del Corredor Central Norte, opina que la Alcaldía debe subsidiar a las operadoras de parroquias cercanas como Llano Grande y Calderón.
Tenga en cuenta
Desde La Ofelia hay 13 rutas alimentadoras: Planada, Colinas del Norte, Pisulí, Roldós, Carcelén Bajo, La Pampa, Mitad del Mundo, Calacalí, Carapungo, Zabala, Calderón, Carcelén Alto y Atucucho.
En la terminal La Marín, al centro de la urbe, el corredor interparroquial a Los Chillos se integra al corredor urbano suroriental, que es parte de la Ecovía.
En la terminal Río Coca, los interparroquiales que llegan de Cumbayá, Tumbaco, El Quinche, Checa... se integran a los corredores urbano nororiental, que es otro tramo de la Ecovía.
Ayer a las 18:00, el alcalde, Paco Moncayo se reunió con los moradores y transportistas de la parroquia de Llano Grande para buscar una solución en cuanto al pago de doble pasaje. Hasta el cierre de esta edición (18:30) no había ningún resultado.
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