MEXICO DF (Reuters) - Un "insaciable" apetito en Estados Unidos por drogas ilegales es el culpable de mucha de la violencia que azota México, dijo el miércoles la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton.
La funcionaria reconoció el papel de Estados Unidos en el problema de los cárteles de la droga en México en su visita de dos días al país donde tratará con el presidente Felipe Calderón planes de Washington para fortalecer la seguridad en la frontera común.
Un creciente número de asesinatos de bandas del narcotráfico en México, que alcanzó 6,300 el año pasado, y temores de que la violencia pudiera extenderse a Estados Unidos ha colocado el combate de México contra la droga en un sitio importante en la agenda del presidente Barack Obama.
Ello, después de años de que México considerara que Washington estaba desatendiendo un problema conjunto.
"Nuestra insaciable demanda de drogas ilegales impulsa el narcotráfico. Nuestra incapacidad de evitar el contrabando de armas a través de la frontera para armar a esos criminales causa la muerte de policías, soldados y civiles", dijo Clinton a reporteros durante su vuelo a la Ciudad de México.
"Siento fuertemente que tenemos co-responsabilidad", dijo.
El combate a los cárteles de la droga -que obtienen sus armas de contrabando desde Estados Unidos y matan a sus rivales muchas veces en las calles a plena luz del día- se ha convertido en la mayor prueba del Gobierno de Calderón mientras los sangrientos crímenes inquietan a inversionistas y turistas.
Clinton dijo que los esfuerzos de Estados Unidos para prohibir las drogas y evitar que sus ciudadanos las consuman claramente no habían tenido éxito y que era injusto culpar a México por la guerra de las bandas del narcotráfico.
Washington recién anunció planes para fortalecer la seguridad fronteriza con un programa de 184 millones de dólares para agregar 360 agentes de seguridad a puestos fronterizos y reforzar la búsqueda de drogas, armas y dinero de contrabando.
RETOS EN LA RELACION
Clinton también tratará durante su visita la disputa sobre transporte que sostienen Estados Unidos y México, además de otros temas comerciales y de migración.
Clinton dijo que los socios comerciales avanzaban hacia una solución a una disputa que llevó a México a aumentar los aranceles a productos estadounidenses por un estimado de 2,400 millones de dólares en represalia por la decisión del Congreso de Estados Unidos de terminar un programa piloto para permitir a camiones mexicanos transitar en territorio norteamericano.
"En la disputa de transporte, estamos trabajando para tratar de resolverla. Estamos haciendo progresos", comentó y dijo que esperaba que el Congreso de su país fuera receptivo a las ideas del Gobierno de Obama.
Clinton, cuya visita incluye una escala en la norteña ciudad industrial de Monterrey el jueves, dijo que los espinosos temas a discutir no significaban que las relaciones entre Estados Unidos y México estuvieran en problemas.
"No lo considero así. Creo que tenemos algunos retos específicos (...) pero toda relación los conlleva", comentó.
México ha resentido el retraso en la llegada de equipo antidrogas que prometió el ex presidente George W. Bush, mientras funcionarios en Washington buscan asegurarse de que esa ayuda no terminará en manos de funcionarios o policías corruptos.
El Congreso de Estados Unidos redujo este mes la ayuda antidrogas que destinará este año fiscal a 300 millones de dólares desde 400 millones del año pasado, bajo un plan de tres años por 1,400 millones de dólares para México y Centroamérica.
Desde que asumió la presidencia de México en diciembre del 2006, Calderón ha destinado más de 6,400 millones de dólares al combate al narcotráfico y enviado 45,000 soldados y policías federales a sitios conflictivos en todo el país.
Sin embargo, México ha dicho reiteramente que sus esfuerzos no rendirán frutos si Estados Unidos no combate el contrabando de armas estadounidenses a territorio mexicano las cuales se usan en en el 90 por ciento de los crímenes que se cometen en el país latinoamericano.
"No son sólo armas. Son lentes de visión nocturna. Son trajes blindados. Estos criminales están mejor armados que los oficiales que hacen valer la ley", dijo Clinton.
"Cuando estás tratando de atrapar a delincuentes y ellos cuentan ... con equipo tipo militar que es mucho mejor que el tuyo, empiezas con una desventaja", señaló.
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