El beneficio es para más de 8 000 personas que usan la infraestructura como punto de movilización regional. Así, se pretende clausurar las miniterminales.
Las recientes adecuaciones en la terminal terrestre de Quevedo, la volvieron más dinámica y segura, para tranquilidad de los viajeros de tres regiones.
La semana pasada fueron habilitados 10 nuevos andenes y un corredor con su cubierta. Ahora, los buses de las cooperativas de transporte de pasajeros, que van hacia la Costa, Sierra y la Amazonia, cuentan con su propia área de estacionamientos.
“Antes solo las cooperativas de transporte de Quevedo y alrededores tenían sus andenes y el resto debía buscar un sitio en la urbe.
Hoy, las cosas mejoraron y las obras fueron ejecutadas por la Empresa Municipal de la Terminal Terrestre (EMTT). Las metas son mejorar el servicio a los usuarios y clausurar las miniterminales”, explicó Rodrigo Carrillo, miembro de la EMTT.
Raúl Castro, usuario, está satisfecho con los cambios y manifiesta el porqué. “Cuando no había los andenes, los carros que viajaban a Quito y Guayaquil se estacionaban en las miniterminales y eso ocasionaba accidentes e inseguridad por causa del robo constante de los equipajes durante las noches y las madrugadas”.
Hoy, los carros que van de paso hacia la Costa o la Sierra se detienen 10 minutos en la terminal. “Cada chofer paga una tasa de USD 2,25. Y las cooperativas provinciales , USD 1”, dijo Patricio Araque, gerente de la EMTT.
El pago de las tasas se devuelve en seguridad y asesoramiento legal gratuito. La seguridad se reforzó con un cuartel de la Unidad de Policía Comunitaria. Además, la Unión Provincial de Cooperativas de Transporte asesora legalmente a los familiares y víctimas de accidentes de tránsito.
Los servicios de telefonía, taxis, baños públicos, sala de espera y guardianía privada (24 horas) también fueron mejorados. Según la EMTT, alrededor de 1 000 personas acuden a esta terminal diariamente y los fines de semana rebasan las 8 000.
El Gerente de la EMTT aseguró que este año la empresa mejorará la iluminación y arreglará las vías de acceso. También se construirán más baños públicos porque el flujo de usuarios se incrementa cada semana.
Las innovaciones contaron con el apoyo de la Subjefatura de Tránsito local y los transportistas agrupados en la Unión de Cooperativas de Transporte de Pasajeros de Los Ríos. Stalin Cevallos, uno de los dirigentes, manifestó que con la ayuda de la Policía y el funcionamiento de la terminal las 24 horas, se podrá terminar con las diversas miniterminales.
Adicionalmente, a los buses que salen o entran a la remodelada terminal, se les coloca un sello en la puerta, con el fin de evitar que recojan pasajeros en las inmediaciones. El control empezó la semana pasada y está a cargo del gremio de los transportistas.
José Zapata, presidente de la Federación de Transportistas del Ecuador, dijo que el sello también tiene otro fin. “De este modo evitamos las coimas que acostumbraban dar los choferes a los vigilantes de tránsito, para que les permitieran coger pasajeros”.
Por eso, una vez que un bus sale de Quevedo, el conductor o su ayudante están autorizados a romper el sello y seguir su ruta.
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