Cuatro heridos dejó el escape de 'Bokito', de 170 kilos, hacia el restaurante del recinto, provocando pánico entre los visitantes.
El zoológico Blijdorp de Rotterdam fue el centro de los hechos donde el animal finalmente fue sedado y capturado por los cuidadores del parque.
De entre los cuatro heridos, solamente una mujer lo fue a causa del gorila -que le mordió en una mano- aunque se encuentra fuera de peligro, según señaló el director del zoo, Tom Doorrestein.
Las otras tres personas, dos visitantes y un empleado, resultaron heridas de forma accidental: una mujer se cayó al intentar correr por la presencia del animal; un hombre que iba en silla de ruedas se lastimó al intentar salir del restaurante y un empleado entró en estado de shock al ver al imponente gorila suelto y tan de cerca.
'Bokito' logró escapar de su jaula, incluso cruzando el canal que rodea su hábitat, hecho que el director del centro calificó de "extraño", porque los simios tienen miedo al agua.
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