El trabajo de los equipos de investigación de Antinarcóticos y de Inteligencia policial existen varias evidencias de la posible relación entre los hermanos Jefferson, Édison y Miguel Ostaiza y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). 
Entre las pruebas, que constan en el expediente judicial, se encuentran que la cocaína decomisada en San Lorenzo y que era de propiedad de la red Ostaiza tenía símbolos que utiliza la guerrilla. Espcíficamente, los paquetes  del estupefaciente tenían impresos los logotipos de 
‘Nike’ y ‘Apache’ que son usados por los frentes  29 y 32 de las FARC, según los archivos de los uniformados.  
Adicionalmente, en la casa  Miguel  Ostaiza en Santo Domingo se halló  un libro con los código de frecuencias de  radio, un código Betania  y las siglas FARC-EP. 
También en una hacienda en Sucumbíos se encontró otros documentos, supuestamente,  de las FARC. 
Por último, en una finca  en Sucumbíos, que era  frecuentada -dice Antinarcóticos - por Solarte, se recuperó  un sobre con el  nombre de Rosa Noboa, la mano derecha de  Jefferson Ostaiza en 
Jooamy, una empresa que fue creada para la compra de varios inmuebles y para participar en múltiples negocios en el país.
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