Esposo de Íngrid: Sufro una situación complicada con ella

BOGOTÁ | EFE

Distanciamiento.

El publicista colombiano Juan Carlos Lecompte, esposo de Íngrid Betancourt, reconoció ayer que atraviesa “una situación complicada”, y no descartó “que se haya acabado todo” con la ex candidata presidencial, que estuvo secuestrada más de seis años por las FARC.

Lecompte, más de ocho años casado con Betancourt, dijo que una posible separación “puede pasar. No solo lo pienso ahora, sino desde antes”. Señaló que entiende que la ex candidata, tras más de seis años en poder de las FARC, quiera estar “sola con sus hijos”.

“El amor por mí –consideró– pudo haberse acabado en la selva”, pero añadió, “hay que darle tiempo a las cosas. Si ya la esperé seis años y medio... La conozco bien y sabía que me iba a pedir un tiempo sola con sus hijos. Le respondí que interiormente me había preparado para eso en todos estos años”, dijo Lecompte en una entrevista en diario El Tiempo de Bogotá.

Betancourt fue liberada junto a otros 14 rehenes de las FARC el pasado 2 de julio, en un rescate del Ejército colombiano.

En Colombia se ha especulado con esa posible ruptura, tras el saludo distante de Betancourt a Lecompte, luego de su rescate, el pasado 2 de julio, y porque Lecompte no haya viajado a Francia con ella.

Lecompte desmintió rumores sobre las causas del distanciamiento y negó que sea por una presunta relación suya con una mexicana cuando estuvo secuestrada Betancourt.

Dijo estar “muy feliz con su rescate”, pero “debo admitir que yo esperaba otra cosa. Esperaba un fuerte abrazo... No hubo un fuerte abrazo. Ahí me puse a un lado, con mucha dignidad. Jamás he sido protagonista en la vida pública de Íngrid”, comentó Lecompte.

Dijo no sentir molestia porque Íngrid se haya referido a su ex marido (Fabrice Delloye) en términos cariñosos, y aclaró que tienen “una relación como de hermanos... es el padre de sus hijos”, aunque remarcó “por ahora, el marido soy yo”.

El 25 de junio, Jorge Gechem, liberado en febrero tras seis años de plagio, anunció su separación matrimonial, por problemas en su cautiverio.

En Colombia, una encuesta da a Íngrid una popularidad del 82% y al presidente Álvaro Uribe, 85%. Antes del rescate tenían 60% y 76%, en su orden. Igual sondeo da a Hugo Chávez 8% y a Rafael Correa 7%.

Mientras, el ex senador Luis Eladio Pérez, quien permaneció secuestrado por las FARC más de siete años, hasta febrero pasado, abandonó Colombia ante amenazas de muerte.