Después de un año del gobierno del presidente Rafael Correa, la aceptación continúa siendo muy alta, lo "que no se ha dado en el país por lo menos en los últimos 27-28 años de democracia", subrayó esta mañana el analista político Simón Pachano.
A pesar de que cayó con el tratamiento de la Ley Tributaria, la aceptación de Correa sigue siendo alta, señaló Pachano durante su diálogo con Citynoticias (89.3 FM en Guayaquil).
A criterio del analista, las confrontaciones que ha tenido el Jefe de Estado con diferentes sectores lo han ayudado a mantener el nivel de popularidad. Pero ello no es casual, resaltó antes de indicar que ese estilo expresa la consigna "que se vayan todos", cuando en el país "se viene manifestando una insatisfacción con los políticos tradicionales desde hace mucho tiempo".
En este sentido, Pachano resaltó que ha habido varios outsiders (nuevos políticos) que han ganado elecciones, como Lucio Gutiérrez, o que han estado a punto de ganar elecciones desde 1996. "Estamos hablando de un fenómeno de más de diez años, y eso lo expresa Rafael Correa con su posición confrontacional, con su enfrentamiento a las élites tradicionales, que es lo que ha constituido el eje de su gobierno".
Pero esta no es la fórmula perfecta, advirtió Pachano. Esta política confrontativa, que no permite encontrar tonos intermedios, puede llevar a la polarización, y corre el riesgo de volverse en contra del propio Gobierno, señaló. "Hasta ahora le ha dado resultados positivos, le ha dado gran apoyo en la ciudadanía, la que ha tenido insatisfacción con los redimientos de los políticos anteriores, pero en el momento en que esa misma ciudadanía empiece a pedir cosas concretas al Gobierno, puede cambiar esa percepción".
Sin ir muy lejos, Pachano recordó que ello, que era hasta hace unas semanas una posibilidad, ya se dio con la aprobación de la Ley Tributaria, que llegó a los bolsillos de los ciudadanos. Entonces la población "comenzó a reflexionar de otra manera, con otros criterios. Ya no reaccionaron simplemente con esa insatisfacción con los políticos anteriores, sino que también lo sometieron al Presidente al mismo escrutinio".
Cuestionado sobre las confrontaciones que ha tenido el mandatario con los medios de comunicación, el analista considera que Correa va a continuar con ese estilo, que es "poco abierto a aceptar la crítica y a entender que en una democracia es necesario contar con opiniones diversas". Sin embargo, descartó que el Presidente abandonará esta característica pues hasta el momento es parte de lo que le ha dado réditos. No obstante, advirtió que este punto también puede volverse en su contra.
Falta de oposición
En otro punto, Simón Pachano descartó que el régimen tenga oposición, en especial cuando no hay posiciones alternativas. Esta ya fue "pulverizada tanto por sus errores y su mediocridad como por las acciones desarrolladas por Rafael Correa".
Lo que hay en este momento, dijo, son grupos que responden de manera reactiva ante el Gobierno, "pero no tienen posiciones de principios claramente establecidos respecto a la economía, a cómo debe ser la nueva Constitución, al sistema político. No veo eso en el Ecuador en este momento".
Si el Gobierno tuvo el 70% del apoyo electoral, cualquier posición alternativa va a tener que surgir del mismo Acuerdo PAIS, prevé. "Tarde o temprano van a tener que aparecer, no sé si divisiones, pero sí posiciones diferentes dentro del mismo movimiento".
En caso de que ello ocurra, a su criterio, cree que puede afectar al proyecto político que tiene PAIS, pero a largo plazo. "En lo inmediato creo que Rafael Correa está muy consolidado. No tiene nadie al frente que se le oponga. Incluso los que estuvieron dirigiendo lo que puede llamarse la oposición, en este momento están fuera del escenario político. Me refiero a Álvaro Noboa -pensar en que él pueda dirigir algo, es dar demasiado crédito- y Lucio Gutiérrez. Los dos demostraron su total incapacidad política y su escasa visión del país y de las necesidades en el momento actual".
Finalmente dijo que el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, está forzado por las circunstancias a entrar en el juego político. Él "siempre va a representar a un sector específico, que es uno de derecha, que va a buscar expresarse por medio de él, pero hay todo un sector de izquierda y de centro-izquierda que va a tratar de buscar otro tipo de expresiones, y esas expresiones no han surgido todavía ".
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